Pintura al agua, en spray, con efectos decorativos… el mundo de la pintura es complejo y existen un montón de productos entre los que puedes elegir para tus trabajos. La clase de pintura que necesitas utilizar en cada caso depende de muchas cosas: del acabado que quieras conseguir, de si vas a usarla en interior o en exterior, si quieres algo definitivo o temporal, de cuánto tiempo tienes… Por eso te traemos esta guía, para que despejes todas tus dudas y descubras qué pintura se adapta más al resultado que quieres conseguir.
Pintura Plástica
¿Para qué sirve? Es la más habitual para pintar las paredes de casa.
Es una de las más usadas para pintar paredes interiores, aunque según el producto también se puede usar en exterior. Es una pintura que seca rápido, es inodora y se limpia sobre ella con mucha facilidad. Además, es bastante opaca y no será necesario que des muchas capas para conseguir un resultado homogéneo. Puedes elegir entre una gran variedad de colores y acabados y además es bastante económica. ¡Todo ventajas!
Esmalte
¿Para qué sirve? Son ideales para renovar superficies de metal y madera.
Es uno de los tipos de pintura que funciona bien tanto en exterior como en interior por su resistencia a factores externos o golpes. Forman películas más finas y lisas que la pintura plástica, protegiendo las superficies sobre las que se aplican, por lo que resultan perfectos para materiales que vayan a estar expuestos a la lluvia, el viento… También puedes usarlos en el interior de tu casa en ventanas, muebles, puertas e incluso en cocinas para proteger la superficie de salpicaduras, manchas y roces.
Dentro de los esmaltes, existen dos dos tipos:
Esmaltes al agua o acrílicos
Secan antes y suelen oler menos. Su aplicación, además, es más sencilla, por lo que se convierte en una mejor opción si no tienes mucha experiencia en el uso de este tipo de pintura.
Dentro de este grupo, hay diferentes productos pensados para una u otra aplicación. Existen esmaltes al agua diseñados, por ejemplo, para cambiar los azulejos del baño de color, algo que hicimos en este tutorial: cómo pintar azulejos.
Esmaltes al disolvente
Suelen ofrecer una resistencia aún mayor pero presentan un tiempo de secado superior a los acrílicos y suelen tener un olor más fuerte.
Pintura a la tiza o chalk paint
¿Para qué sirve? Se usan mucho para renovar muebles de madera, aunque se pueden utilizar en todo tipo de superficies.
Por su versatilidad y su resultado, la pintura a la tiza es uno de los tipos de pintura más usados en decoración. Se puso muy de moda hace unos años, aunque Miguel Ángel ya la usaba en sus pinturas en el Siglo XVI. Se trata de una pintura muy fácil de usar, que no necesita imprimación y con la que podrás cambiar el aspecto de tus muebles en poco tiempo. Es multisuperficie y es lijable, por lo que es perfecta para conseguir efectos envejecidos. En este vídeo, te contamos cómo puedes hacerlo. 😉
Barniz
¿Para qué sirve? Protege las superficies sobre las que se aplica.
El barniz es un producto que se usa principalmente para cuidar, proteger y dar brillo a la madera -aunque también existen barnices para otro tipo de superficies, como plásticos o metales-. Hay muchos agentes que pueden dañar la madera como los insectos (termitas, carcoma), la humedad e incluso el sol. Por eso es interesante utilizar barniz para nuestras maderas, ya sean de interior o de exterior, para preservar su estado y prolongar su vida.
Pintura con efectos
¿Para qué sirve? Se trata de productos pensados para conseguir resultados decorativos específicos en las paredes o muebles, según el caso.
Además de las pinturas más habituales, existen un montón de pinturas con efectos decorativos con las que dar una imagen más original y atrevida a tus paredes o muebles. Normalmente están pensadas para su uso en interiores, aunque se pueden encontrar algunas que funcionan muy bien también en el exterior.
La pintura decorativa permite que uses toda tu imaginación trabajando con contrastes que crean ambientes únicos. Puedes usarla en solitario, combinadas con colores planos o con otros efectos y texturas. ¿Quién dijo que pintar era aburrido?
Pintura efecto arena
Tiene un acabado de aspecto granulado, arenoso. Es apta tanto para interior como para exterior y también funciona bien en paredes rugosas o con gotelé.
Pintura metalizada
El aspecto metálico que consigue es perfecto para incluir en ambientes con estética moderna o urbana y queda genial si lo combinas y crear contrastes, por ejemplo, con pintura lisa.
Pintura efecto óxido
Esta clase de pintura también la puedes usar sobre una superficie rugosa como el gotelé, aunque funciona sobre una capa de pintura previa. Si quieres un aspecto envejecido y oxidado de tu pared u objeto de decoración (por ejemplo, ¿has pensado lo bien que quedaría en un espejo?) es la pintura decorativa para ti.
Pintura efecto pizarra
Es una de las pinturas más divertidas para usar porque no sólo consigues que la superficie quede como una pizarra ¡sino que también puedes usarla como tal! Puedes usarlo en las paredes de la cocina y escribir una receta tradicional a modo de mural, usarla en habitaciones de niños para dar una nueva vida a la puerta de un armario, el marco de un espejo… ¡las posibilidades son infinitas para sacar toda tu creatividad!
Pintura en spray o aerosol
¿Para qué sirve? Te permitirán pintar con rapidez todo tipo de superficies.
El formato en spray te puede venir genial si quieres ahorrar tiempo en la aplicación de cualquier producto. Hace que la tarea sea rápida, limpia, y con un buen acabado. Podemos encontrar todo tipo de pinturas en este formato: barnices, esmaltes, pintura a la tiza…
Uno de sus usos más comunes es en muebles. Es conveniente considerar si compensa usar pintura en spray por el coste por litro que tiene, superior a otros tipos de pintura. Depende del mueble que quieras decorar, puedes necesitar varios botes y eso hará que se dispare el precio.
Ten en cuenta que en la aplicación, aunque el spray sea con base acuosa, hay que llevar mascarilla porque esta pintura puede ser tóxica.
Además de las de este lista, hay un montón de pinturas más: pinturas antihumedad, náuticas, lacas, temple… la lista es amplia y compleja. La elección de una u otra dependerá de tus necesidades concretas, tu presupuesto o de cuánto tiempo quieres dedicar a la aplicación. Elijas la que elijas, es importante que siempre leas las instrucciones del fabricante y las sigas para conseguir un buen resultado. ¡A practicar!
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