Caballo de juguete con un neumático
Un poco de madera, unos tornillos, pintura y cuerda. Es lo que necesitas para transformar un neumático usado en un caballo de juguete que puedes poner dentro o fuera de casa. ¡Con riendas y todo!
¿Qué necesitas?
Herramientas
- Cepillo
- Cúter
- Lápiz
- Paletina
- Pincel
- Rotulador
- Sierra de calar
- Taco de lija
- Taladro
Materiales
- Cuerda
- Esmalte al agua
- Madera
- Neumático
- Tornillos de métrica
- Tornillos para madera
- Tuercas
Paso a Paso
1. Corta la madera
Empecemos por lo básico. ¿Cuántas piezas formas este caballo de juguete? Además del neumático, tienes que crear seis piezas de madera, divididas en dos grupos. Por un lado, dibuja y corta la silueta de la cabeza del caballo y dos piezas pequeñas que, una a cada lado, sirvan para anclarla a la superficie del neumático. Estas piezas son rectas por arriba y se adaptan a la forma del neumático, con una línea curva, por debajo. Por otro lado, crea tres piezas para apoyar el caballo en el suelo: dos piezas alargadas que cubran todo el largo del neumático y el ancho de la goma por debajo y una pieza que sirva de unión entre ellas, pasando por el hueco de la rueda. Te dejamos una imagen con todas las piezas, ¡no tiene pérdida! Usa una sierra de calar para cortar la madera y lija bien cuando acabes.
2. Haz los agujeros
Las piezas de madera van unidas al neumático por tornillos de métrica y tuercas, así que necesitas hacer unos cuantos agujeros. Haz un par de agujeros en la parte superior de los anclajes de madera de la cabeza -las piezas pequeñas-, uno al inicio y otro al final. Puedes usar esos mismos agujeros para marcar los puntos de unión con el neumático y hacer también los agujeros en este.
Haz también los agujeros en las dos piezas laterales de la base, un par por pieza, y aprovecha para hacer también los del neumático. La idea es que el neumático quede centrado entre estas dos piezas alargadas.
¡Ojo! Usa una broca adecuada para el tamaño de los tornillos de métrica que vayas a usar.
3. Monta la cabeza del caballo
Turno ahora para unir las piezas de la cabeza del caballo entre sí. Atornilla los dos anclajes pequeños de madera, con la parte curva hacia abajo, en los laterales de la cabeza del caballo, a modo de peana. Usa un taladro y tornillos de madera para ello. ¡Tu nueva mascota va tomando forma!
4. Pinta todas las piezas
Cuando la cabeza esté montada, decora todas las piezas del caballo -neumático y piezas de madera- con un poco de pintura. Nosotros hemos usado un esmalte al agua, pero una pintura en spray también te podría valer. Pinta como quieras, deja secar y, con un rotulador, dibuja las facciones de la cara del caballo.
5. Fija la base de madera
Monta la base que sostendrá al caballo sobre el suelo. Fija el neumático a las dos piezas laterales, usando tornillos de métrica y tuercas en los agujeros que hiciste. Cuando lo tengas, atornilla la tercera parte de la base a los cantos superiores de esas piezas, pasándola por dentro del neumático.
6. Atornilla la cabeza y crea la cola
¡Último paso! Para acabar de montar el caballo, fija la estructura de la cabeza a la parte superior de la rueda con tornillos de métrica y tuercas. Después, corta un poco de cuerda para hacer unas riendas y la cola del caballo, para la que tendrás que hacer un agujero -haz un nudo por el interior del neumático y deshilacha el final de la cuerda con la ayuda de un cúter-.
¡A galopar! No le hemos puesto nombre a nuestro caballo, ¿cómo crees que deberíamos llamarle? Déjanos un comentario y, de paso, dinos qué te ha parecido el tutorial.
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