Cómo transformar un taburete básico
Transformar un taburete básico y darle tu toque personal no es algo complicado. Aquí te mostramos cómo en tan solo unos pasos puedes conseguir un mueble distinto, único y con estilo para tu hogar.
¿Qué necesitas?
Herramientas
- Brocha
- Destornillador
- Esponja
- Lija
- Paletina
- Sierra de calar
- Trapo
Materiales
- Chalk Paint
- Clavos
- Cola blanca
- Esmalte multisuperficie
Paso a Paso
Para este proyecto, hemos comprado un taburete básico de Ikea, el modelo Marius, que hemos personalizado con pintura multisuperficie, listones y madera y chalk paint. ¡Ojo al paso a paso!
1. Desatornilla y limpia el mueble
Lo primero que tienes que hacer es desatornillar la base de plástico del taburete básico. Luego prepara las patas de metal con una lija de grano fino, pasándola por toda la superficie de las patas para abrir el poro. Después, con un trapo humedecido en alcohol, limpia todos los restos de polvo que has generado en el paso anterior. Quita también las tapas de las patas del taburete.





2. Pinta la estructura metálica
Abre tu bote de pintura y, con ayuda de una varilla de madera, mueve la mezcla hasta conseguir que sea completamente homogénea. Luego aplica la pintura. Te aconsejamos que utilices una brocha o paletina de una forma que se adapte a la forma de las patas, para que el acabado sea mucho más preciso. Ve poco a poco cubriendo toda la superficie de metal, comenzando por los ángulos, esquinas y ranuras, y continúa por el resto de las patas en capas cruzadas y regulares. Deja secar 24 horas.
Nosotros hemos pintado las patas con un esmalte multisuperficie que no necesita imprimación. Es apto para exterior, resistente a los golpes, a las manchas y, además, no se va a decolorar aunque pase mucho tiempo expuesto al sol.


3. Aplica una segunda capa
Aplica una segunda capa a las patas para conseguir una mayor intensidad de color. Hazlo de la misma manera, asegurándote de que cubres, poco a poco, toda la superficie. Deja secar otras 24 horas.

4. Mide y corta la madera
Para dar un aspecto más rústico a nuestro asiento, hemos utilizado unos listones de madera unidos a una base de contrachapado redonda para decorar el asiento.
Para cortar la base, recupera el asiento de plástico que quitaste al principio y úsalo como plantilla para saber qué diámetro necesitas para la pieza. Una vez tengas marcada la circunferencia en la madera contrachapada, corta con una sierra de calar. Después, lija muy bien los cantos para eliminar cualquier imperfección que se haya podido generar al cortar.



El siguiente paso es cortar los listones que irán unidos a la base circular de madera. Para ello, coloca todos los listones juntos, hasta que tengas la anchura del diámetro de la base. Para que no se muevan, únelos con cinta de carrocero. Pon tu pieza circular de contrachapado encima de los listones y con un lápiz marca muy bien la circunferencia, de forma que se quede marcada en cada uno de los listones. Córtalos con una sierra de calar.


5. Une las piezas de madera
Para unir las piezas de madera, pon un cordón de cola blanca sobre la base de madera y extiéndelo por toda la superficie. Luego, ve colocando por orden los listones, haciendo que coincidan con la circunferencia. Sargenta las piezas utilizando una tabla y deja que repose unos minutos hasta que se seque. Si quieres, para fijar aún mejor los listones a la base, puedes añadir unos clavitos pequeños por la parte de abajo del asiento con la ayuda de un martillo.
Cuando todas las piezas estén bien pegadas, quita los sargentos y lija perfectamente todos los bordes y las uniones. Esto te puede ayudar a quitar alguna gota de cola blanca en caso de que haya salido fuera de la superficie.




6. Pinta la base de madera
El siguiente paso es pintar la base. Antes de empezar, mueve muy bien la pintura. Para favorecer el acabado rústico, utiliza una chalk paint o pintura con acabado de tiza (nosotros la hemos elegido de color gris claro). Esta pintura cubre muchísimo y una aplicación será más que suficiente para cubrir toda la superficie. Con una paletina o rodillo multisuperficie, aplica la pintura por todo el asiento y deja secar.


7. Decora la base
El chalk paint que hemos utilizado te permite, una vez seca, retirarla con una esponja húmeda. Esta técnica ayudará a que el taburete tenga un aspecto aún más rústico o vintage. Una vez has pasado la esponja húmeda, deja secar un mínimo de 4 horas antes de poder volver a manipular la base.


8. Monta el taburete
El asiento y las patas ya están listos, así que es el momento de unir las piezas. Coloca las tapas de las patas y, para unir la base a ellas, utiliza un atornillador eléctrico (como en nuestro caso los agujeros no están hechos en la madera, utilizar este aparato hará el trabajo más fácil).


¡Y listo! Ya tienes tu taburete básico totalmente renovado, convertido en un mueble a tu estilo. 🙂 ¿Qué te ha parecido el tutorial? ¡Déjanoslo saber en los comentarios! Y si te ha gustado esta idea, seguramente te encantará nuestro tutorial de cómo personalizar una cómoda de Ikea de melamina.
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