3 tipos de riego para la terraza
El riego es un sistema que se utiliza para aportar agua a nuestras plantas y que tengan el suministro necesario para favorecer a su crecimiento. Según el tipo de planta o vegetal, necesitaremos un tipo de riego u otro. Para las superficies grandes o jardines existen aspersores o mangueras de larga distancia que usamos de forma cotidiana, pero para los pisos o casas con terraza o balcón ¿qué utilizamos?
¿Qué necesitas?
Herramientas
- Manguera para terrazas
- Pulverizador
Materiales
- Plantas
Paso a Paso
1. Riego por pulverización
Uno de los sistemas que con más frecuencia se pasa de largo, pero que es muy útil, es el riego por pulverización. Es ideal para semilleros, ya que evita que las semillas se remuevan y humedece el sustrato. Además, sirve también para mantener las plantas de interior limpias y aumentar su humedad. Mientras las plantas de exterior se limpian solas gracias a la lluvia y el viento, las plantas de interior necesitan que estemos pendientes para evitar plagas y enfermedades.
2. Riego por goteo
Para las casas que disponen de terrazas o huertos urbanos una de las opciones es el riego por goteo. Se utiliza mucho para regar frutas, verduras, cereales, flores o viveros pequeños. Consiste en una estructura formada por tubos que se colocan a ras de suelo o enterrados. Se trata de un riego a baja presión que permite ahorrar mucha cantidad de agua ya que es muy preciso, infiere en las raíces y evita la pérdida de agua por evaporación, dispersión o filtración.
3. Riego con manguera
Pero si el riego por goteo no te convence, también existe la opción de utilizar una manguera de terraza. Es una de las principales formas de regar y la más habitual en el uso doméstico. Aunque el riego con manguera es habitual para jardines o superficies grandes, ya que permite regar en poco tiempo grandes cantidades y llegar a todas las plantas, existen mangueras más pequeñas perfectas también para la terraza.
Uno de los aspectos a tener en cuenta a la hora de utilizar la manguera es asegurarnos de que el conector del grifo encaje adecuadamente con la manguera, esto evitará que tengamos pérdidas de agua y que la presión que utilizamos sea la deseada. Las mangueras permiten aumentar la cantidad de agua si las plantas lo necesitaran e incluso cambiar el caudal y la presión gracias a su lanza o pistola de riego, por lo que es mucho más completa permitiendo una mejor adaptación según el tipo de planta.
Así que ya sabes: para elegir el tipo de riego adecuado tienes que tener en cuenta el tipo de planta que quieres regar y cuánta cantidad de agua necesita. ¿Tienes alguna duda? ¿Quieres saber qué riego es mejor para tus plantas? ¡Déjanos tus comentarios!
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