Paso a Paso

1. Prepara el neumático

Lo primero que tienes que hacer antes de pintar el neumático es limpiarlo a fondo para asegurar que los productos se adhieren bien y garantizan un buen acabado. Puedes empezar usando un cepillo de cerdas duras para desprender la primera capa de suciedad.

Después de que hayas quitado lo más engorroso, con ayuda de un estropajo mojado, frota todo el neumático hasta que quede totalmente limpio. ¡No te olvides de los surcos! Si te encuentras alguna mancha de grasa, puedes utilizar algún producto específico que te ayude a acabar con ella.

Una vez que el neumático esté completamente limpio, deja que seque antes de seguir con el proyecto.

2. Prepara la zona de trabajo

Protege la superficie en la que vayas a trabajar. Para ello, extiende papel protector y fíjalo con cinta de carrocero. Para que te sea más sencillo trabajar con el neumático, te aconsejamos elevarlo. Puedes usar, por ejemplo, unos listones de madera que te ayuden a ponerlo en altura. ¿Listo? Ya tienes todo preparado para ponerte manos a la obra.

3. Aplica una imprimación

Este paso no es estrictamente necesario para todos los tipos de pintura, aunque nosotros te recomendamos que lo hagas de cualquier manera. Usar la imprimación en la goma del neumático hará que la pintura que apliques se adhiera bien, quedando un resultado uniforme y duradero.

Aplica la imprimación con ayuda de una paletina. En este caso hemos usado una imprimación universal, pero existen diferentes tipos. Elige siempre una que se adapte a las necesidades de tu proyecto -en este caso, asegúrate de que es la indicada para preparar la goma del neumático-.

4. Pinta el neumático

Cuando la imprimación esté seca, el neumático estará listo para que puedas aplicar la pintura. Puedes elegir entre diferentes tipos de pintura para hacerlo en función de la ubicación final del proyecto, del tiempo que tengas o del resultado que busques.

La pintura plástica es una opción genial si quieres un recubrimiento muy resistente. No desprende olores fuertes, por lo que puedes aplicarla en interior sin problema, y se puede limpiar sobre ella con mucha facilidad. Además, es bastante opaca, así que no necesitarás muchas capas para obtener un buen acabado. La aplicación no presenta ninguna dificultad: respeta siempre los tiempos de secado que te indique el fabricante.

Por otro lado, con la pintura en spray, podrás dejar tu neumático listo en un visto y no visto. Es ideal para una aplicación rápida y limpia. La pega que puede tener la pintura en spray es su coste, más elevado que otro tipo de pinturas. Si no vas a necesitar usar muchos botes, es una opción fantástica pero, en caso contrario, hay alternativas que te pueden salir más económicas.

Te recomendamos que antes de lanzarte a pintar hagas una pequeña prueba para que te hagas una idea del resultado y te familiarices con la aplicación. Antes de aplicar el producto, agita bien el bote y asegúrate de estar en un lugar ventilado. En cualquier caso, será necesario que uses una mascarilla para protegerte. Aplica el producto en pasadas cortas y a una distancia de la superficie de unos 20cm . Trata de evitar que la pintura se acumule porque pueden acabar apareciendo gotas que estropeen el acabado. Aplica varias capas dejando tiempo para que vayan secando. Cuando acabes, deja secar el tiempo que recomiende el fabricante. ¡Listo!

¡Consejo! Asegúrate de que la boquilla del bote no queda obstruida para que puedas usarlo sin problema en otras ocasiones. ¿Cómo? Simplemente da la vuelta al bote en una superficie desechable y aprieta la boquilla hasta que solo salga aire sin restos de pintura. ¡Listo!

Estos son todos los puntos claves que tienes que tener en cuenta a la hora de pintar tu neumático. ¿Necesitas más ayuda para tu proyecto? Entonces no te puedes perder este tutorial sobre cómo cortar neumáticos.

Ahora es momento de llevar estos consejos a la práctica, ¡cuéntanos qué tal te ha ido en comentarios!

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