En realidad, el pan de plátano o banana bread no es realmente un ‘pan’, sino más bien un tipo de bizcocho que se llama así por la forma del molde en el que se suele hornear, y porque su textura es un poco más densa que la de un bizcocho normal.

Para su preparación podrás utilizar indistintamente harina con o sin gluten (la verdad es que hemos probado las dos opciones, y ambas funcionan sin problema). También te damos una alternativa al uso de productos lácteos que quizás te interese.

Las siguientes cantidades son adecuadas para un molde rectangular de 24cm x 13cm.

Ingredientes para hacer pan de plátano

2 plátanos maduros (3 si son pequeños)
4 huevos
1 yogur natural (puedes sustituirlo por 1/2 taza de compota de manzana o yogur vegetal)
1/3 taza de aceite de oliva (o girasol)
1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
2 tazas de harina (de repostería, integral o mezcla de harinas sin gluten)
3/4 taza de azúcar moreno o de caña
1 cucharadita de bicarbonato
1 cucharadita de canela
1/4 cucharadita de sal
Extras opcionales: Chips de chocolate, nueces, avellanas, arándanos desecados, pasas, etc.

El plátano maduro es un ingrediente increíble. Recuerda su gran poder endulzante e intenso sabor, y ¡aprovecha con alegría esos plátanos que te miran desde el frutero!

Cómo hacer un Banana Bread paso a paso

4 pasos: batir ingredientes húmedos, añadir elementos secos, añadir chocolate y nueces, y echar la masa en molde rectangular con papel de horno

Tiempo necesario: 1 hora y 30 minutos

Como no vas a tardar demasiado en preparar la masa, puedes ir precalentando el horno a 180º. Deberás tener a mano un par de cuencos grandes, ya que vamos a mezclar los ingredientes líquidos en uno de ellos, y los sólidos en el otro.

Mezcla los ingredientes húmedos:
En el primer cuenco, bate los huevos muy bien, integra el yogur (o compota de manzana), el aceite y la esencia de vainilla. Aparte, tritura los plátanos con un tenedor, hasta que tengan una textura de puré. Cuando lo tengas, incorpora el plátano a la mezcla con un batidor de varillas (mejor a mano) hasta que esté más o menos cremoso.
Mezcla los ingredientes secos:
En el otro cuenco, mezcla muy bien con un tenedor todos los ingredientes secos: la harina, el azúcar, el bicarbonato, la canela y la sal.
Junta toda la mezcla:
Ahora sí, integra los ingredientes secos en el cuenco de los húmedos, y remueve todo haciendo movimientos envolventes hasta que la masa quede uniforme.
Añade los ingredientes bonus:
Si has pensado añadirle “extras” para darle un puntito más de rockandroll, ahora es el momento de incorporarlos a la mezcla. Nosotros hoy le hemos puesto nueces picadas y chips de chocolate. Como no teníamos chocolate para postres, hemos troceado una tableta de chocolate a la sal, ¡que le ha dado un toque increíble!
Hornea la mezcla:
Engrasa el molde rectangular (con una pizca de aceite o mantequilla) o pon un papel de horno para que después puedas desmoldarlo con facilidad. Vierte la masa dentro del molde, y ayúdate de una espátula o lengua de silicona para no desperdiciar ni una pizca de mezcla.

Con el horno ya caliente (con calor arriba y abajo, pero sin grill), introduce el molde inmediatamente (sin dejarlo reposar) más o menos a una altura central. Hornea a 180º durante 50-60 minutos. Recuerda NO abrir el horno a media cocción, para que suba adecuadamente. Para comprobar si está bien hecho, al llegar a los 50’ pincha el pan con un cuchillo en el centro, y mira si sale seco. (¡OJO! Este bizcocho es más húmedo de lo habitual, con lo cual no debe salir manchado de masa cruda, pero sí con algo de grasa).
¡Paciencia! Déjalo enfriar:
Una vez esté listo, sácalo del horno y deja enfriar unos 10 minutos aún dentro del molde, para que se atempere. Después desmóldalo y si puedes, déjalo enfriar sobre una rejilla. Aunque el olor va a tentarte a probarlo inmediatamente, debes dejar que se enfríe antes de hacerlo ;).

Aprovecha esos plátanos que ya están demasiado blandos, y no vas a comerte. Cuanto más maduros estén, más fácil será triturarlos y ¡más dulce aportarán al conjunto!
Al utilizar bicarbonato sódico como impulsor de la masa, es muy importante que una vez mezclados los ingredientes, los pongas a hornear inmediatamente. El bicarbonato comienza a actuar desde que entra en contacto con un líquido, de manera que si esperas demasiado para meter la masa en el horno, puede que el pan no suba correctamente.
El pan de plátano es un bizcocho muy versátil. Si mantienes los elementos base, puedes experimentar con el sabor del yogur, añadirle otras frutas, incorporar especias como jengibre, clavo molido o cardamomo, incluir cacao en polvo o añadirle cobertura de chocolate… ¡no te cortes!

Sirve un vaso de leche ¡y a disfrutar!

Al llevar fruta fresca, para que dure más y se conserve correctamente durante unos 4 días, deberás guardar el banana bread dentro de la nevera, en la zona intermedia. En estos días, puedes aprender a conservar bizcochos en la nevera en nuestro artículo sobre conservación de alimentos.

Si tienes dudas sobre cuántos gramos son 1 taza de harina, puedes ayudarte de un conversor universal de pesos y líquidos. Y si te preguntas por qué en esta receta utilizamos bicarbonato en lugar de levadura, aquí encontrarás la explicación.

Te garantizamos que tu pan de plátano será un éxito asegurado. ¿Te animas a ponerte el delantal y hacerlo tú mismo? ¿Con qué lo acompañarías? ¿Se te ocurren otras recetas increíbles que te apetece que probemos? Cuéntanos todas las dudas que te queden, y muéstranos el resultado de tu banana bread. ¡A merendar!