Paso a Paso

1. Corta las piezas circulares

¡Manos a la obra! El primer paso tu espejo en forma de sol consiste en crear la base sobre la que va a ir colocado tu espejo y las pajitas.

Para ello, comienza trazando dos circunferencias de igual tamaño sobre un tablero DM. El diámetro de estas debe ser unos centímetros más grande que el del espejo, al menos dos centímetros, ya que este espacio extra servirá para sostener las pajitas. Después, dentro de una de las circunferencias, haz otra concéntrica, esta vez de iguales dimensiones a tu espejo.

Ya tienes dibujadas las dos piezas de madera que constituyen la base del espejo: una circular cerrada y otra, también circular, pero con un espacio interior, en forma de aro. La primera será la base que sostendrá el espejo y la segunda, hará de marco.

Corta ambas piezas con una sierra de calar, siguiendo las marcas que has hecho con tu compás. La pieza en forma de aro requiere un poco más de trabajo: para cortar la circunferencia interior, lo más fácil es que tomes un taladro y una broca de pala, y hagas una perforación dentro de la superficie de madera que se va a desechar, así podrás introducir la sierra con facilidad.

2. Lija las piezas

Para mejorar el acabado y asegurarte de que el resultado es lo más liso y profesional posible, toma una lija y pásala por los bordes de ambas piezas de madera.

3. Pega el espejo a la base

A continuación, tienes que unir el espejo a la base. Para ello, toma adhesivo de montaje y aplícalo sobre el reverso de tu espejo. Después, júntalo a la base moviendo ambas piezas ligeramente para asentar el adhesivo, y presiona fuertemente sobre la unión durante unos segundos. A la vez, asegúrate de que el espejo quede lo más centrado posible.

4. Corta las pajitas

¡Hora de cortar las pajitas que harán de rayos de sol! Este paso es clave, pues será el que más personalidad dé a tu espejo, así que tómate tu tiempo para decidir qué forma quieres darle a tu sol. Nosotros elegimos un diseño que requería pajitas cortadas en 6 tamaños diferentes.

5. Pega las pajitas

A continuación, pega las pajitas según tu diseño. Nosotros hemos ido intercalando los tamaños, de forma que, gradualmente, formaran 8 grandes “picos” o rayos de sol. Para ello, aplica un poco de pegamento líquido sobre uno los extremos de las pajitas y ve presionándolas sobre la madera que rodea el espejo, hasta que todos tus “rayos de sol” queden perfectamente adheridos.

Lo más recomendable es usar un pegamento que actúe de forma instantánea, para que el proceso sea mucho más rápido. Nosotros hemos usado el SuperUnick Poder Inmediato de la marca Ceys, muy eficiente y fácil de aplicar.

6. Pega la pieza frontal

Ahora, debes rematar la estructura del sol colocando el “aro” de madera que cortaste en un principio. Esta vez, lo tienes que colocar enmarcando el espejo, sobre las pajitas. Aplica sobre una de sus caras el mismo adhesivo que has utilizado para pegar las pajitas y adhiérelo.

7. Pinta las piezas

¡Hora de dar color a tu espejo! En este caso, la pintura en spray resulta la más conveniente y fácil de aplicar. Antes de aplicarla, cubre tu espejo para prevenir manchas de producto (lo puedes hacer con un trozo circular de madera y cinta de carrocero). Después, pulveriza la pintura por toda la superficie y deja secar el tiempo que indique el fabricante.

¡Y listo! ¿Qué te parece este original espejo? Cuéntanoslo, así como cualquier duda o sugerencia, en el apartado de comentarios. Y si te ha gustado, echa un vistazo también a cómo hacer un espejo de madera nórdico. 🙂

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